Energía solar y autoconsumo eléctrico, el binomio perfecto
La necesidad de hacer el consumo energético de un inmueble más sostenible, unido al alto precio que está alcanzando la electricidad en España, ha hecho que la energía solar y el autoconsumo se hayan colocado a la cabeza de las instalaciones de energía renovable.
Vivimos en un país que, junto con Portugal, tienen el mayor número de horas de toda Europa, siendo de más de ocho horas, por lo que aprovechar la energía limpia y gratuita que nos proporciona el astro rey se convierte en una idea estupenda para ahorrar en la factura de electricidad.
El autoconsumo fotovoltaico consiste en producir, de forma individual de electricidad para el propio consumo, a través de paneles solares fotovoltaicos. En la actualidad este sistema es legal siempre y cuando la electricidad que se produzca sea utilizada por uno mismo.
Componentes de una instalación de autoconsumo
La instalación de paneles fotovoltaicos se puede resumir en cuatro componentes principales que permiten la transformación de la energía del sol en electricidad:
Placas solares
Es la parte más importante ya que recibe la radiación solar y convierte la energía del sol en electricidad. Cuanto más grandes sean, más electricidad.
En la actualidad existen dos tipos de placas solares según el compuesto con el que se fabrica el panel: silicio monocristalino y de silicio policristalino. La mayor diferencia está en el precio y el rendimiento: el policristalino rinde más, pero cuesta más. Para elegir hay que tener en cuenta el espacio del que se dispone.
Baterías de almacenamiento
Está claro que por la noche no hace sol, por lo que se pueden instalar baterías que almacenen la electricidad no consumida para consumirla en otro momento.
Inversores solares
Permite adaptar la electricidad que se obtiene a las características del suministro del inmueble. De esta forma, transforma la electricidad para que el sistema funcione en las mejores condiciones.
Contador digital
Es como el que tenemos en casa. Permite saber qué cantidad de electricidad se consigue a través del panel solar. De esta forma sabemos cuánta electricidad usamos del sistema de autoconsumo y cuál de la red eléctrica.
Subvenciones para instalaciones fotovoltaicas
El precio de este tipo de instalaciones ha caído mucho en los últimos años pero sigue siendo algo caro. Sin embargo, el Gobierno puso a disposición de las personas una serie de subvenciones para la instalación de estos sistemas, intentando de esta forma promover el uso de las energías renovables a nivel de vivienda y cumplir, de esta forma, los objetivos de la Unión Europea para los años 2020, 2030 y 2050.
¿Cómo solicito estas ayudas?
Es algo muy sencillo, sólo debes rellenar los formularios que aparecen en las diferentes webs de las Comunidades Autónomas o el Ayuntamiento, dependiendo de qué subvención queramos.
Requisitos
- Presupuesto detallado del coste
- Que no se haya solicitado otra subvención
- Se debe solicitar por parte de la
- Sólo se puede subvencionar una instalación por inmueble.
- Que se cumplan los requisitos de potencia
Tipos de subvenciones para el autoconsumo
Existen dos tipos de subvenciones para este tipo de instalaciones:
- Subvenciones sobre el precio de la instalación: Se otorgan a nivel comunitario y supondrán una cuantía de entre 3.000€ y 4500€. Suelen aplicarse en forma de porcentaje sobre el coste final de la instalación, aunque en ocasiones no se aplican con el precio con IVA, sino sin él.
- Subvenciones sobre impuestos del Estado: Se otorgan a nivel municipal aplicando al IBI y al ICIO. Este tipo de ayudas pueden estar en torno a los mil quinientos euros.
Como hemos dicho, no se puede pedir más de una subvención, por lo que hay que elegir entre las dos anteriores. Lo más ventajoso suele ser la del precio de la instalación. Sin embargo, estas subvenciones van con plazo, si se te ha pasado el plazo de alguna y no quieres esperar, pide la otra.